REFLEXIONES DE UN REPUBLICO AL SEÑOR GENERAL EN JEFE VLADIMIR PADRINO LOPEZ, MINISTRO DE LA
DEFENSA DE VENEZUELA Y JEFE DEL CEO
Urica, 30 de diciembre de
2015.
Señor general Vladimir Padrino López, por la fuerza de los hechos y ante las graves
circunstancias políticas, económicas y sociales por las que atraviesa
Venezuela, un complejo escenario a la
vista de todos los venezolanos y del mundo internacional. Revestido y amparado solamente por mi
investidura de simple republico y autorizado por lo establecido en el Artículo 62 de la vigente Constitución de la república de Venezuela, me creo con la
fortaleza moral y cívica de que me siento poseedor, con ellos mi único título y
capital, para dirigirme a Ud.,y expresarle mis angustiosas reflexiones dada su
condición de magno porta estandarte por
mandato de la historia y de nuestra Constitución Nacional como máximo conductor del único Factor permanente de la República, nuestras
Fuerzas Armadas, y entre ellas, de
nuestro glorioso Ejercito Nacional heredero de las Queseras del Medio, de Carabobo, del Paso de los Andes, de Boyacá,
Bombona, Junín, Pichincha y de Ayacucho.
Señor general Padrino, excento porque mi conciencia lo siente, de toda responsabilidad de los horrores del
pasado reciente, y de los de más
atrás, así como de las vergonzosas
complicidades del presente, que
espero en lo adelante nos sirvan de
experiencia para lo porvenir, y de luz
no engañosa, para juzgar con acierto los acontecimientos y a los hombres, causa
eficiente del descredito y postración moral en que ha caído la patria de Bolívar, y de tantos otros hidalgos varones y mujeres hijos de Venezuela. Valido de esa única condición, he tomado esta imperiosa decision de e
expresarle a Ud., algunas inquietudes y
reflexiones que son el sentimiento expresivo y la apreciación ponderada que
emanan de lo más hondo de mi corazón y sentimiento de pertenencia de mi
venezolanidad, y que con toda seguridad,
es la misma de otros tantos miles de venezolanos civiles y de los otros que
como yo, en algún momento portaron con
orgullo también el digno uniforme de soldado de la república integrante del Ejercito
Libertador.
Señor general Padrino, hoy presagiamos
que una vez más, nuevamente, sentimos amenazado y en vilo expresos mandatos constitucionales que son garantes de las instituciones fundamentales del Estado, para la
preservación misma de la paz,
para la supervivencia de la república,
de la nación y del Estado mismo.
Señor general Padrino, en 1830 bajo
el inmenso liderazgo y la mano certera y habilidosa del general J. A Paez, empinado sobre
las cenizas de la patria, en un país desbastado tanto como el de hoy, el
Centauro de los Llanos, con el apoyo decidido de una buena parte del Ejercito
Libertador, la mayoría al momento, y del talento civil de la república, sorteo
tremendas dificultades históricas que parecían imposibles rebasarlas, también
en un tránsito similar al actual, lo
logro.Y pudimos tener por mandato constitucional,
una patria independiente, y con ella, la
primera república civil liberal y democrática. Y por la voluntad mayoritaria de los pueblos de Venezuela, y también por mandato de esa Constitución sancionada en 1830, fuimos venezolanos por primera vez por el derecho del ius solis, por ello somos los venezolanos hoy libres de todo yugo extranjero.
Señor general Padrino, el 22 de mayo
de 1863 nuevamente, 33 años más
tarde, el general Paez en su condición de
árbitro y arbitrio de la república, lacerado el país por terribles sucesos, suscribió el histórico Tratado de Coche, que
puso fin a una contienda civil sangrienta y estéril que por 5 años habia desbastado y
desangrado nuevamente a la patria,
inmolando miserablemente a sus hijos y destruyendo
la paz y la vida económica del país, y se logró la paz y se salvó la naciente república libre de Venezuela. Y a
partir de allí se comenzó rediseñar el país que siempre hemos querido tener.
Señor general Padrino, en Febrero de 1936, el general en jefe Eleazar López Contreras, nuevamente
un soldado de ese mismo Ejercito
Libertador que Ud. hoy manda y comanda, heredo un país rupestre que
dejaba atrás 27 años de una la larga noche gomecista que nos mantenía aun atados insólitamente al siglo XIX, a un tercio de haber entrado ya
el nuevo siglo XX. Habilidosamente y
bajo su certera y sabia conducción y mando, el general López se transformó en el gran cabrestero capitán de
esa tormentosa transición, y supo guiar a Venezuela en medio de una
violencia política que parecía incontrolable y de una incierta fractura política similar a la actual, y pudo lograrlo con éxito absoluto, y además logro conducir el país con calma y cordura a puerto seguro, lo que le abrió la puertas de la historia buena de la
patria.
Señor general Padrino, el 24 de
noviembre de 1948, en momentos de graves dificultades, otra vez, y bajo
circunstancias históricas políticas extremas, que amenazaban tenebrosamente como ahora la paz, el respeto
al mandato del soberano y el bienestar
de los venezolanos, en un escenario tan complejo como el presente, ese Factor Permanente conducido por hombres de ese Ejercitó Libertador, que es el que hoy Ud., hasta ahora ha comandado prudentemente y tiene bajo su mando y su comando, tuvieron en
esa oportunidad nuevamente que sortear,
tomar y asumir decisiones dolorosas y
extremas, y lo hicieron, y garantizaron la paz, la estabilidad del país y la
continuidad de los logros de los objetivos transitorios y permanentes del
Estado.
Señor general Padrino, hoy, esa misma patria de todos los tiempos, la
misma de Bolívar, de Sucre, de Paez, de Guzman, y de Eleazar López Contreras, y de otros causahabientes, como fue el caso
excepcional también de Marcos Pérez Jiménez, ellos supieron decidir en sus momentos la suerte de la república en
tránsitos tempestuosos.
Señor general Padrino, nubarrones y
fundados presagios de tormentas que
pudieran tener consecuencias impredecibles para este país, hoy nuevamente amenazan y ponen en juego peligrosamente
la paz nacional y pretenden contravenir
peligrosamente los mandatos del Contrato Social que rige actualmente a los venezolanos.
Señor general Padrino, ese Factor Permanente de la Republica bajo su conducción, mando y decidida actuación
civilista que ha cumplido hasta ahora, ha tenido
y ha asumido nuevamente como se
esperaba, la histórica y enorme
responsabilidad en tiempos tumultuarios
y de grandes desafíos por el porvenir, de garantizar como lo hizo, que ese 6D se
aceptaran los resultados de la voluntad expresa mayoritaria y soberana de los
venezolanos plasmados en ese insólito, pero nada sorpresivo acto electoral. Y los
venezolanos y el mundo exterior están contestes, que ello fue posible porque
bajo su decidida y acertada conducción y
manejo de la situación, hasta ahora
hábilmente demostrada, se pudo dar cabal
cumplimiento a los mandatos que el pueblo se dio en la Constitución
vigente de 1999, que se ratificaron abrumadoramente
mediante el ejercicio soberano del sufragio el
pasado 6 de diciembre de 2015.
Señor general Padrino, los nuevos parlamentarios electos, pletóricos sus ideales y corazones de nuevas
esperanzas y los reelectos ese 6D, sin distingo de valoración política e
ideológica, van a conformar el nuevo Poder Público más importante de los componente
institucionales del Estado, como es la
Asamblea Nacional, y ellos son entonces desde ese momento la sagrada
expresión de la legitima voluntad del soberano, que es el pueblo.
Recuerdole aquella frase del
Emperador Ulpiano (170-228 d. C), cuando en tiempos tumultuosos del imperio, sobre los orígenes de su poder y del poder, ante el senado Romano expreso:“El poder emana
de tres fuentes: de Dios, del Papa y de los que no tienen nada”. Y los que no tienen nada señor general
Padrino, se expresaron libérrimamente ese
6D sin apremio alguno, refirmando la
urgente necesidad de que se de inicio a una retoma inmediata de conciencia nacional para juntos con el concurso de todos los
buenos hijos de esta patria, reconstruir
la república, antes de que se nos valla de las manos, que es lo que está
sucediendo, o ya sería demasiado tarde.
Y así, a la mayor brevedad conducirla nuevamente por los caminos del orden, de la grandeza, de la paz, de la
armonía, del progreso material y
espiritual, hacia el sitial a donde nos sugirieron nuestros libertadores, hacia la Venezuela Modélica.
Señor general Padrino Ud., y quienes le acompañaron en su decidida e
histórica actuación, y hay que
reconocerlo de viva voz y así quedara en las páginas de esta historia que
ya está escrita sobre esos acontecimientos antes, durante ese día y
posteriores al 6D, dejando a un lado las
pasiones partidarias o de cualquier otro parecer, que su actuación como soldado
a quien la patria le deposito en
sus manos el sagrado deber de defender
sus instituciones, lo hizo, tal como Venezuela, America y el mundo libre lo
esperaba.
General Padrino, su desafío apenas
comienza y es monumental e histórico y no solo se circunscribe a que Ud.,como el máximo comandante operacional de nuestras Fuerzas
Armadas, le dé fiel cumplimiento al
mandato expreso en la Carta Magna: “De que la FAN es una institución al servicio de la nación y en ningún caso al
de persona o parcialidad alguna.”
General Padrino, los que no tienen
nada, que es el tan mentado soberano,
dijo lo que sentía libérrimamente y se expresó sin miramientos soberanamente el 6D. Y el desafío suyo y de
las armas de la republica que Ud., hasta ahora prudentemente ha comandado, es
seguir garantizando ese fiel mandato y refrenar
a costa de cualquier sacrificio, todo intento o acción para que ese mandato no se lleve a cabo. Ese es por
ahora su desafiante reto, Ud., no tiene otro, ese es su deber por ahora.
La historia le tiene abierta a Ud., sus dos páginas y los historiadores venezolanos y de otras latitudes del mundo estamos atentos a ello, ya pluma en mano. Díctenos Ud., lo que en su conciencia de soldado, de venezolano y de demócrata, tenemos que escribir. DIOS SALVE A VENEZUELA !!!
La historia le tiene abierta a Ud., sus dos páginas y los historiadores venezolanos y de otras latitudes del mundo estamos atentos a ello, ya pluma en mano. Díctenos Ud., lo que en su conciencia de soldado, de venezolano y de demócrata, tenemos que escribir. DIOS SALVE A VENEZUELA !!!
Dr. J. Eduardo Guzman Pérez.
Historiador-militar.
Sociedad Divulgadora de la
Historia Militar de Venezuela.
(Miembro activo en funciones).
C.I. No. V-1.189.712
URICA, tierra de héroes sepulcro de los tiranos, a 30 de diciembre de 2015.
Cel.: 58+414-1782578